Pues que ayer fuimos a ver la última del mercenario bocazas y madre mía, ¡me lo he pasado teta! Tenía un hype a niveles estratosféricos y no sólo ha logrado cumplir con todas mis expectativas, sino que se ha dado el lujo de reventarme el medidor de molonidad.
¡Dios, es que es un no parar!. A partir de un guion que pese a la puta vorágine de locura, apuñalamientos, insultos elaborados, cachondeo y despiporre que es la peli, mantiene la lógica, es coherente con todo el puñetero Multiverso MARVEL (¡como le arrea al tema de marras!) y funciona de puta madre. Humor desatado, puro disparate, irreverencia y divertimento, una auténtica macarrada, como no podía ser de otro modo. Mogollón de cameos inesperados y maravillosos, referencias, huevos de pascua y menciones a patadas. Palabrotas (muchas palabrotas), vicios y perversiones. Y mala leche a raudales, soltando hostias como panes a diestro y siniestro, riéndose de todo y de todos. Mete zascas brutales a todo dios, en especial a su antigua productora y a otras del gremio; puyas en forma de «jajas» que lo flipas, pero es que además se la suda y no tiene reparos en hacer lo propio con Disney y su nueva casa. Lo de romper la cuarta pared, pues ya no es eso: directamente la echan abajo, se te meten en la cocina, te saquean la nevera , se sientan en tu sofá y se beben tu cerveza.
Aquí no se respeta a nada ni a nadie. Acción desenfrenada y humor, a veces inteligente, otras tantas (las más) zafio y grosero. La química entre Hugh Jackman (el único e inigualable Lobezno) y Ryan Reynolds es absoluta y forman un tándem imbatible, dentro y fuera de la pantalla. Muchas, muchas sorpresas y todas te dejan con el culo torcido, sonrisa en la cara y despollado de la risa.
Es una jodida maravilla, poco más puedo decir. Sí, solo una cosa más: La banda sonora. Me ha parecido un acierto enorme el usar grandes hits de música comercial, temas ultramegaconocidos y famosos como soundtrack. Le viene como anillo al dedo, con una intencionalidad absoluta en cada escena en la que suenan.
En fin, que si todavía no la habéis visto, ya estáis tardando, que os va a chafar las sorpresas los verdaderos bocazas que pululan en redes.